La lluvia cae, el Sol lanza sus rayos dorados, la tierra agarra... las plantas que día a día crecen, florecen y marchitan. Todo ocurre en el jardín donde nada es eterno, un día sonríen los girasoles, otro llora el sauce, mientras yo espero llegar a ser un árbol.




viernes, 31 de diciembre de 2010

Feliz Año Nuevo =)

Cierra los ojos concéntrate y evádete de la realidad; en estos momentos estas inmerso en el corazón de tus recuerdos vividos, en el almacén de tu vida, de todo lo que has sentido desde que tus ojos comenzaron a ver la luz de lo real. En este espacio reservado únicamente a tu memoria, buscas entre todas las carpetas de registros la que tiene el título " Año 2010 "; la abres y recuerdas todo lo que te ocurrió desde la resaca del anterior fin de año, hasta este mismo momento en el cual te has puesto a recordar; momentos de duras decisiones, amargas sorpresas, algunas más dulces, días de corazones y otros de carcajadas, ríos de lágrimas y mares de sueños, y por supuesto momentos de pura felicidad al lado de la gente a la que quieres.
Ahora abres los ojos y te encuentras con el cielo estrellado, sobre tu cabeza y frente tus ojos se dibujan miles de cientos de constelaciones, se pinta el mismo cielo que observabas hace justo un año. Mientras contemplas este mural anual, una sonrisa se dibuja en tu cara pidiéndole a cada una de las estrellas un deseo para el nuevo año que toca una y otra vez a tu timbre para que le dejes pasar a tu vida.
Ya has pedido todo lo que deseas para este nuevo año: salud, familia, amigos, amor, dinero, sueños, felicidad... ya es la hora, tras la última uva a ritmo de campana, miles de fuegos iluminan el cielo estrellado deseando un feliz año 2011.


Os deseo a todos un feliz año 2011, que cada día que viváis sea mejor que el anterior e inolvidable por siempre. Nunca os olvidéis de hablarle a las estrellas, porque solo ellas os sabrán escuchar. Un abrazo, Attua =).

lunes, 27 de diciembre de 2010

Promesa de amor prohibido (L)

Primero pon el video en play, y mientras la música indunda tus pensamientos con bellas imágenes, leed la que nada en los míos. =)








Promesa de Amor Prohibido.


Sus pasos se plantaban en la arena dejando un mapa del camino que recorría para llegar al borde del acantilado, donde le esperaba la más bella de las flores que sus ojos habían observado, y su corazón amado. Él ya era un árbol que había jugado con la fortuna de la vida mucho más tiempo que la bella flor, su tronco era roñoso y descuidado, no como el liso tallo de ella; sin embargo ese viejo árbol amaba a esa bella flor con todas sus fuerzas, y así lo demostraba en su carrera por llegar a ella antes de que el viejo Sol se fuera a dormir.





Su pelo ondulado bailaba con el viento mientras sus ojos se clavaban en el horizonte, esperaba a que su amado cumpliera la promesa de su tierna infancia, la promesa de liberar un amor prohibido cuando ya no lo fuera; hoy, era su decimoctavo cumpleaños. Jadeante de amor, él llegó a donde estaba ella, era el lugar más hermoso que recordarían el resto de sus vidas; el suelo mezclaba la fina hierba que besaban sus pies, con la cálida arena, el cielo azul naranjado dibuja un mural de envidia, frente a él estaba el Sol deseando buenas noches, y junto a éste, ella, su flor amada durante varias primaveras. Su linda cabecita dio la vuelta para mirarle a él con la misma mirada con la que él la miraba a ella, el viento siguió bailando con sus peinados despeinados, mientras él se aproximaba a ella para abrir la cárcel de su amor.





Sólo un paso los separaba; ella lo abrazó a él, y él cogió su abrazo, el Sol mientras se iba durmiendo cada vez más con una sonrisa de enamorado. Dos palabras pronunció él a la vez que ella, “Te Amo”, el Sol soltaba sus últimos rayos que deseaban amor eterno a los más tiernos enamorados que jamás había visto, y la oscuridad se hizo con el más sincero beso de amor acompañado por la joven Luna.


Dedicado a todas las personas que se atreven a decir "te quiero", y luchan por su amor.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Navidad =)

Comienza oficialmente esa época del año donde la religión, el capitalismo, y el amor... se mezclan en un desfile de hermosos árboles, que esperan sorpresas y milagros en sus ramas y raíces. Sin embargo, en ocasiones, nuestros árboles son más hermosos y sanos que nosotros mismos; ¿quiere decir esto qué nos esforzamos por convertir nuestros hogares, y por supuesto, nuestros árboles, en representantes de nuestros deseos de salud física, mental y como no, "económica" y social ?
No lo sé, pero una vez más Tim Burton nos envía una respuesta, o no...



La Navidad de Palillo

Palillo pudo notar que su árbol de Navidad

parecía un churumbel bastante más sano que él.


La melancólica muerte del Chico Ostra, Tim Burton.

sábado, 18 de diciembre de 2010

La Navidad de luces.

Turrones, juguetes, números de lotería, y una gran variedad de publicidad inundan ya las cadenas de televisión junto a utópicas películas americanas donde no existe la palabra tristeza, todo esto nos avisa de que la Navidad ya se acerca. Sin embargo, esta fiesta no tiene el mismo valor para todos aquellos que la disfrutan; siendo una de las festividades más importantes de la tradición cristiana, es lógico pensar que muchos la interpretan y la viven por su significado original del nacimiento de Cristo; otros, yo diría la gran mayoría, ven sin darse cuenta esta fiesta como el carnaval del capitalismo, una época donde todo el mundo gasta su dinero en regalos que tienen el sabor frío de una tradición y no el calor de un gesto de amor. Pero sin detenernos mucho en analizar estas dos formas de ver la navidad, nos vamos a introducir en el sentimiento más mágico de esta festividad.


Desde todos mis sentidos la navidad tiene otra visión diferente, se puede sentir en ella la fantástica e inocente magia que desde niños nos inculcan con personajes como los Reyes Magos o Papá Noel; el cine, por otro lado, nos muestra una ventana a diferentes mundos diseñados en las mentes de todo tipo de cineastas, algunos de estos mundos son sangrientos, y otros tan magníficos que desearíamos vivir en ellos. A este último tipo pertenecen la gran mayoría de las películas de Navidad, en ellas se nos presentan pueblos y ciudades cubiertas por mantos blancos de nieve, cientos de luces que dan vida al cielo y a hogares, la gente es feliz y se sonríen, ocurren hechos mágicos e inexplicables, los regalos nunca dejan de aparecer, y como guinda a este pastel de felicidad coloreada, el beso de dos enamorados bajo la armonía del muérdago. Es inevitable que los ojos se nos inunden de color, vida, ilusión, amor, alegría, e incluso ¡¡¡esperanza!!! ; de hecho en ocasiones una lágrima recorre nuestra mejilla hasta llegar a nuestra sonrisa por ver en esas dulces escenas lo que todos buscamos, la felicidad.



Al apagar el televisor tras el desfile de los créditos, nos damos cuenta de que nuestra realidad no es igual de fantástica que en las películas, pero esto no evita que nos esforcemos en buscar esa magia en nuestras vidas. Por las calles la gente no es igual de egoísta y maleducada que el resto del año, al contrario, te sonríen y desean feliz navidad sin saber siquiera tu nombre. En las tiendas los vendedores se conviertes en amigos que te ayudan a encontrar el regalo perfecto, pero claro… todo es por vender, sin embargo, sumergidos en la búsqueda de la magia navideña pasamos ese dato por alto. Los regalos escasos de sentimientos verdaderos, pasan en este plano a estar llenos de palabras que el resto del año no nos atrevemos a decir, como perdón, sigue así, gracias o te amo; pero sin duda alguna el momento estelar de la búsqueda, ocurre al pasear sumergido bajo las infinitas luces de la noche; hace frío y mientras andas en compañía de personas a las que quieres y sonidos armónicos, alzas la vista y te paras, de repente, sin darte cuenta te recreas dentro de una de esas películas de Navidad. Es en este momento cuando sientes la magia, da igual con quien estés porque cuando observas esas luces se te dibuja una sonrisa en la cara acompañada de todos los sentimientos que tienes al ver una de esas películas, y de nuevo aparece esa lágrima de ternura. Acto seguido, demuestras lo que sientes a quien tienes al lado, abrazas a un amigo, a un familiar, o besas a alguien especial bajo ese mural de colores, porque haces de este momento breve de magia una verdadera película basada en hechos reales. Tras ese momento piensas que la vida no es tan horrible, que puede ser como siempre has soñado, y andas feliz riendo, hablando o intercambiando miradas bajo cientos de luces de felicidad, y acompañado de las personas que más quieres.



Puede que no sea la forma correcta de ver esta festividad, pero yo la veo como una época donde todos (aunque no sea real) somos más humanos y creemos en la magia, un momento que se repite cada año donde la amistad y el amor pasan a un primer plano, y olvidamos todo lo malo. Es sin duda alguna, una fiesta donde el mayor regalo es sin duda el calor de una sonrisa.



"El secreto para ser feliz es preguntarse porqué no lo somos. "

Dedicado a una sonrisa y a su dueña. Gracias =).


sábado, 4 de diciembre de 2010

Bienvenido =)

Abrí la trampilla que me mantenía protegido en el sótano del jardín, subí los ruidosos peldaños que me conducían de nuevo al mundo, y fue entonces cuando mis ojos volvieron a iluminarse.



No podía creerme lo que ante mí se dibujaba con la sonrisa de un recuerdo olvidado; la tierra era verde y a la vez multicolor gracias a las miles de flores que abrazaban mis pies, las ramas de los numerosos árboles me saludaban como si me hubieran esperado durante décadas; cerca de un anciano roble, un ciervo refinado bebía delicadamente el agua cristalina y fresca del río que dividía la tierra…por último, más allá de donde mi vista podía llegar, observaba las imponentes y blancas montañas que junto a las rayadas nubes y el curioso Sol, me protegían de lo que en un tiempo pasado me obligó a bajar al oscuro, frío y seco sótano – seco porque toda la humedad me había abandonado- .



Comencé a andar por el blando suelo, mientras, me detenía para oler las flores, quitarme la suciedad acumulada por el tiempo en mi cuerpo con el agua del río, jugar al escondite con los animales de ese nuevo y regenerado mundo, y cantar junto a los pájaros en vuelo… Cuando la entrada del sótano se encontraba a tres sinfonías de mi, una lágrima recorrió mis mejillas hasta llegar a mis secos labios. Había encontrado mi hogar, fui hacia a él y lo abracé… luego me tumbé a sus pies, miré hacia el cielo y sólo veía su cara sonriéndome en tono de “Bienvenida”.
La puerta del sótano se cerró, la vida volvería a funcionar y yo con una extraña felicidad le contaba a la Secuoya que nunca había ni podría dejar de soñar.




"Mi amiga la Secuoya "